Comer Post-70

· Equipo de Comida
¿Alguna vez has pensado que la forma en que comes podría estar perjudicando silenciosamente tu salud? Especialmente después de los 70 años, seguir con las tres comidas tradicionales al día podría acelerar el envejecimiento y llevar a problemas de salud.
Vamos a explorar cómo ajustar tus hábitos alimenticios para mantenerte más saludable y vivir más tiempo
¿Son adecuadas las tres comidas al día después de los 70?
Con el paso de los años, es posible que notes que tu apetito disminuye. Lo que solía ser un gran plato de arroz ahora parece demasiado. Muchas personas mayores experimentan indigestión, hinchazón y estreñimiento. Esto es una señal de tu cuerpo de que tu digestión se ha ralentizado y el hábito de tres comidas al día ya no es ideal. Cuando eras más joven, tu rápido metabolismo y enzimas digestivas robustas hacían que tres comidas fueran suficientes para obtener energía y nutrientes.
Pero al envejecer, la motilidad gastrointestinal se ralentiza, tu páncreas funciona menos eficientemente y tus capacidades de absorción se debilitan. Comer en exceso puede sobrecargar tu estómago e intestinos. Además, los malos hábitos alimenticios pueden aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y osteoporosis. Después de los 70 años, es momento de reconsiderar la estructura dietética tradicional.
¿Cuántas comidas al día son las mejores?
¡La respuesta podría sorprenderte: no son tres ni dos, sino "pequeñas comidas frecuentes"! La investigación muestra que para las personas mayores de 70 años, el patrón alimenticio más saludable es de cuatro a cinco comidas pequeñas al día. Este enfoque tiene muchos beneficios:
1. Reducción de la carga gastrointestinal: Comer porciones más pequeñas facilita la digestión, reduciendo el riesgo de gastritis y úlceras.
2. Estabilidad del azúcar en sangre: Comer comidas grandes causa picos de azúcar en sangre, mientras que las comidas pequeñas y frecuentes mantienen estables los niveles de azúcar en sangre, disminuyendo el riesgo de diabetes.
3. Menor riesgo de enfermedades cardíacas: Comer en exceso puede espesar la sangre e incrementar el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Las comidas pequeñas y frecuentes reducen este riesgo.
4. Mejora de la absorción de nutrientes: Las personas mayores son propensas a la desnutrición. Las comidas pequeñas y frecuentes ayudan al cuerpo a absorber mejor las proteínas y vitaminas, previniendo la pérdida de músculo.
Riesgos para la salud de comer en exceso después de los 70
Si mantienes el hábito de "tres comidas al día más comer hasta sentirte lleno" después de los 70 años, debes tener cuidado con estos problemas de salud:
1. Fluctuaciones en el azúcar en sangre: La función pancreática debilitada en las personas mayores significa que las comidas grandes provocan picos de azúcar en sangre, seguidos de caídas, aumentando significativamente el riesgo de diabetes.
2. Aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares: Comer en exceso eleva los niveles de lípidos sanguíneos, espesando la sangre y aumentando el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, especialmente en aquellos con hipertensión o hiperlipidemia.
3. Problemas gastrointestinales: Muchas personas mayores padecen indigestión, estreñimiento y hinchazón, a menudo debido a comer en exceso y a la disminución de la función digestiva. Las comidas pequeñas y frecuentes pueden aliviar estos problemas.
4. Pérdida de masa muscular y desnutrición: Después de los 70, la pérdida de músculo se acelera. Una ingesta insuficiente de proteínas puede llevar a sarcopenia y osteoporosis. La nutrición adecuada es crucial.
Consejos del médico para una alimentación saludable después de los 70
1. Cuatro a cinco comidas al día: Desayuna, almuerza y cena, y agrega tentempiés saludables como nueces, leche o huevos alrededor de las 10 a.m. y las 3 p.m. para evitar la sensación de hambre.
2. Alimentos ricos en proteínas: Los huevos, pescado, carne magra y productos de soja son excelentes fuentes de proteínas. Apunta a al menos un huevo y un vaso de leche al día para prevenir la pérdida de músculo.
3. Carbohidratos equilibrados: Demasiados granos refinados pueden elevar el azúcar en sangre. Sustituye al menos un tercio de tus granos diarios por granos enteros como avena, batatas y arroz integral.
4. Muchas verduras y frutas: Las verduras de colores oscuros (espinacas, zanahorias, brócoli) son ricas en antioxidantes que protegen los vasos sanguíneos. Opta por frutas bajas en azúcar como manzanas, pomelos y arándanos para evitar picos de azúcar en sangre.
5. Limita los alimentos procesados: Evita los alimentos altos en sal, azúcar y procesados como pepinillos, embutidos y bebidas azucaradas, que son perjudiciales para la salud.
6. Calcio y vitamina D: La leche, el tofu, las semillas de sésamo y las verduras de hoja verde oscuro son fuentes naturales de calcio. Combínalos con una exposición moderada al sol para ayudar a tu cuerpo a sintetizar vitamina D y prevenir la osteoporosis.
Después de los 70 años, comer bien es más importante que comer alimentos costosos. Recuerda: ajustar tu dieta a comidas pequeñas y frecuentes es el secreto para una vida más larga y saludable.